Eran la 1 a. m. del día sábado 22 de agosto del 2020, cuando prendí mi televisor y me encuentro con esta noticia.
13 jóvenes habían muerto en una discoteca Thomas Restobar, del distrito del Los Olivos, en la ciudad de Lima, Perú.
Aproximadamente 120 personas estaban participando de una fiesta, en una discoteca en el citado distrito, en pleno estado de emergencia nacional por la covid-19.
Los jóvenes en el intento de evadir a las autoridades que habían sido alertadas de esta falta, quisieron salir por única puerta con que cuenta el local asfixiando a los primeros que llegaron a la puerta y que no pudieron abrir la puerta por el mal diseño con que estaba hecha. El local según algunas fuentes, no contaba con autorización para funcionar como discoteca y tampoco contaba con las mínimas medidas de seguridad para concentrar a muchas personas.
Por ahora el saldo es: 13 muertos, de los cuales 11 estaban contagiados de Coronavirus (covid-19),
Por ahora el saldo es: 13 muertos, de los cuales 11 estaban contagiados de Coronavirus (covid-19),
detuvieron a 23 personas esa noche, quienes 15 de ellos dieron positivo al contagio del Covid-19.
A la fecha se sabe que varios de los asistentes tenían antecedentes penales.
